BNP Paribas Asset Management ha dado un paso significativo en el proceso de digitalización de la industria financiera con el lanzamiento de sus primeras participaciones tokenizadas en fondos del mercado monetario. Esta iniciativa, basada en tecnología de registro distribuido (DLT), permitirá llevar a cabo operaciones transfronterizas más ágiles y eficientes. Se trata del segundo fondo tokenizado aprobado por el regulador luxemburgués, la CSSF, tras el pionero lanzamiento de Franklin Templeton a comienzos de año.
La operación se ha desarrollado en colaboración con Allfunds Blockchain como socio tecnológico y con BNP Paribas Securities Services, que actúa como agente de transferencia y proveedor de servicios de negociación. Esta iniciativa se enmarca dentro de los avances impulsados por el Eurosistema en torno a las pruebas con monedas digitales de banco central (CBDC), consolidando el compromiso del grupo con la innovación regulada.
Según la gestora, esta emisión representa un paso clave hacia la evolución de los tokens de seguridad y está pensada para mejorar la experiencia de los clientes institucionales. Aprovechando el sólido historial de un fondo monetario luxemburgués ya existente, el proyecto ha facilitado la ejecución de operaciones con una contraparte francesa en tiempo real.
La tokenización nativa de las participaciones permite procesar órdenes directamente en blockchain, eliminando el sistema tradicional basado en lotes y mejorando la eficiencia operativa. Este nuevo enfoque ofrece información instantánea sobre suscripciones y reembolsos, así como una liquidación más rápida y transparente gracias al valor liquidativo en tiempo real.
Desde BNP Paribas AM destacan que esta innovación refuerza su compromiso con la transformación digital del sector y abre la puerta a nuevos desarrollos basados en activos tokenizados dentro de un entorno regulado y seguro.
