Las criptomonedas cotizan con descensos destacados este miércoles, arrastradas por la incertidumbre geopolítica y las expectativas sobre la política monetaria en Estados Unidos. El bitcoin (BTC) pierde cerca de un 2 % y se sitúa por debajo de los 105.000 dólares, mientras que ethereum (ETH) retrocede algo más y ronda los 2.520 dólares.
El retroceso también afecta al conjunto de las altcoins. Tokens como solana (SOL), cardano (ADA) o sui (SUI) registran caídas superiores al 3 %, mientras que otros como dogecoin (DOGE), XRP o tron (TRX) ceden con menor intensidad. Ninguna criptomoneda con una capitalización superior a los 1.500 millones de dólares presenta ganancias en las últimas 24 horas.
Estas caídas se producen en un momento de elevada tensión internacional. El conflicto entre Irán e Israel continúa escalando, tras las últimas declaraciones del presidente estadounidense Donald Trump, quien lanzó una advertencia directa al líder supremo iraní, Alí Jamenei. “Sabemos exactamente dónde se esconde. Es un objetivo fácil, pero no lo vamos a eliminar… al menos, por ahora», afirmó en su red Truth Social, advirtiendo además que la paciencia de Estados Unidos “se está agotando”. En otro mensaje posterior, exigió una “rendición incondicional” a Teherán.
La espera a la reunión de la Fed afecta al precio del Bitcoin
El nerviosismo geopolítico se suma a la atención que genera hoy la reunión de la Reserva Federal. Aunque el mercado descuenta una nueva pausa en el ciclo de recortes de tipos, los inversores estarán pendientes del dot plot, el gráfico que recoge las previsiones de tipos de los miembros del FOMC. Una previsión con menos de dos recortes podría reforzar la narrativa de tipos elevados durante más tiempo, afectando negativamente a los activos de riesgo como las criptomonedas.
Según Danske Bank, se espera que la Fed mantenga su previsión de dos recortes en 2025, seguidos de tres más en 2026. No obstante, los analistas no anticipan un mensaje especialmente claro por parte de Jerome Powell. “Los riesgos se inclinan hacia una reacción moderada del mercado”, apuntan.
Matteo Greco, analista sénior de Fineqia, destaca que las expectativas de recorte se han reducido drásticamente este año: de 100 puntos básicos a apenas 50. “El mercado laboral sigue siendo sólido y la inflación, aunque contenida, aún supera el objetivo del 2 %. Si la crisis en Oriente Próximo se prolonga, podríamos ver que las previsiones de recorte bajan incluso hasta los 25 puntos básicos”, advierte.
Pese a la presión actual, algunos expertos consideran que un entorno de tipos elevados y desequilibrios fiscales en EE. UU. podría, a medio plazo, reforzar el atractivo de activos como el oro y el bitcoin como reserva de valor frente a la incertidumbre económica.