Este mercado es muy competitivo en España pero hay que hacer mucho en este ámbito. Países como Grecia se han interesado mucho, por encima del nuestro. La idea inicial se centró en lanzar su propia criptomoneda “Olivacoin”, pero desde entonces el equipo ha girado hacia la idea de crear contratos futuros de aceite de oliva . En lugar de construir su propia infraestructura desde cero, han decidido lanzar su producto bajo el Protocolo de Opium.