El IRPF o Impuesto sobre la renta de las personas fijas es el impuesto que graba el dinero obtenido por haber realizado un trabajo o un servicio.
Dentro del impuesto sobre la renta de las personas físicas podemos detectar dos tipos de ingresos;
—Dinerarios: Los ingresos dinerarios son los ingresos que conseguimos directamente de nuestro trabajo.
—En especie: Los ingresos que obtenemos aparte de nuestro trabajo como pueden ser las dietas, el seguro médico, el medio de transporte
Finalmente, los dos se sumarán y habrá que restarle el porcentaje de retención designado para tu tramo de salario anual bruto.
Dependiendo del dinero que consigamos a lo largo del año, tenemos que pagar un % de retención que va destinado al estado, los tramos son los siguientes:
Hasta 12.450 euros – 19,0%
12.450 euros a 20.199 euros – 24,0%
20.200 euros a 35.199 euros – 30,0%
35.200 euros a 59.999 euros – 37,0%
60.000 euros a 299.999 euros – 45,0%
A partir de 300.000 euros – 47,0%
La declaración del IRPF se tiene que hacer entre el 11 de abril, y termina el plazo el 30 de junio.
Asimismo, esto lo deberás de hacer si anualmente has cobrado más de 14.000 €.
La principal diferencia entre las reducciones y las deducciones es que las reducciones lo que hace es restar a la base imponible y las deducciones a la cuota íntegra.
Las reducciones por tributación conjunta o las aportaciones a sistemas de previsión social son algunos de los ejemplos de reducciones.
Asimismo, existen otras deducciones como son las de maternidad, familia numerosa o doble imposición nacional.
Finalmente, cuanto mayor sean las reducciones o las deducciones, menor cantidad deberás a la hacienda española.