Al S&P 500 se lo considera el índice más representativo de la situación real del mercado, se llama El índice Standard & Poor’s 500.
Los orígenes del S&P 500 se remontan a 1923, cuando la empresa Standard & Poor’s introdujo un índice que cubría 233 compañías.
Se formuló en 1957 al extenderse para incluir las 500 compañías más grandes de Estados Unidos.
Este índice bursátil se compone de las 500 empresas más grandes de Estados Unidos y pondera de acuerdo a la capitalización de mercado de cada una de las empresas.
Este índice expresa mejor la situación real del mercado accionario y de bonos, por lo que es más sensible que el Dow Jones y el Nasdaq 100.
Las empresas que entran en este índice están elegidas por un comité, este comité tiene unos criterios según los cuales eligen qué compañías entran.
Los criterios principales para entrar en este índice son 8:
Capitalización bursátil, liquidez, domicilio, capital flotante, clasificación del sector, viabilidad financiera, periodo de tiempo durante el cual ha cotizado en bolsa y bolsa de valores.
El mismo es ajustado para tener en cuenta las decisiones que toman las corporaciones que afectan la capitalización del mercado.
La emisión de acciones, pago de dividendos y eventos de reestructuración, tales como fusiones empresarias o desprendimiento de porciones de la empresa.