
Tron (TRX) es una criptomoneda descentralizada cuya función es crear un sistema de intercambio de contenidos descentralizado donde los usuarios reciban tókenes por esos contenidos sin intermediarios.
Justin Sun y su organización Tron Foundation crearon Tron en 2017.
Comenzó en la blockchain de Ethereum antes de migrar a su red principal en 2018.
En julio de ese año, la compañía adquirió BitTorrent, el servicio de intercambio de archivos, y lo incorporó al ecosistema TRON.
Finalmente, en octubre de 2019, anunciaron una asociación con Samsung, el gigante de la electrónica de Corea del Sur.
Para comprarla, se puede comprar a través de exchanges que permiten intercambiar el dinero fiduciario (Euros, Dólares…) por estas.
Simplemente, deberás crearte una cuenta en uno, ingresar el dinero que deseas depositar y en un momento lo tendrás en tu cartera.
Para venderlas, simplemente deberás buscar en la billetera la criptomoneda, y buscar el par de la moneda fiduciaria a la que desees cambiar.
Si esta no tiene un par directo a la moneda fiduciaria, deberemos cambiarla primero a una stablecoin, para luego cambiarla a la moneda que queramos.
La puedes encontrar en casi cualquier exchange.
Sin embargo, un exchange copa el 19% del volumen mundial de TRX y es en el exchange de criptomonedas más grande del mundo que es Binance.
Estimar el precio de un activo financiero o criptomoneda en el futuro es muy complejo.
La fórmula para calcular el precio que tendrá en un futuro dependerá de la capitalización bursátil y del número de acciones en circulación.
La complejidad de esto varía dependiendo de la criptomoneda, pero en Tron se complica especialmente.
Tiene un protocolo en el que conforme se van transfiriendo las acciones de un particular a otro, este número de acciones disminuye o “se queman”.