Disputa legal entre BlockFi, FTX y Three Arrows Capital
La plataforma de préstamos de criptomonedas en situación de quiebra, BlockFi, está actualmente en una disputa legal con FTX y Three Arrows Capital (3AC), ambas también enfrentando dificultades financieras, en relación con la recuperación de sumas considerables destinadas a sus acreedores.
Mediante una presentación realizada el 21 de agosto ante un tribunal de quiebras en Nueva Jersey, BlockFi argumenta que no se debe relegar a sus propios acreedores al final de la línea, dado que los acreedores de FTX habrían sufrido pérdidas debido a supuestas acciones indebidas de la bolsa, la cual aparentemente se habría apropiado de 5,000 millones de dólares que BlockFi había prestado.
La búsqueda de una solución equitativa para todas las partes involucradas se presenta como un desafío importante, mientras que el tribunal deberá determinar cómo se resuelven estas reclamaciones interrelacionadas en medio de la incertidumbre y los desafíos legales propios de la naturaleza emergente de estos mercados.
«Con el objetivo de salvaguardar la equidad para los acreedores de los activos de BlockFi, es crucial que el tribunal desestime las reclamaciones presentadas por FTX basándose en la doctrina de las ‘manos sucias'», destacó BlockFi en su argumento legal.
Examinando la relación entre BlockFi y FTX
FTX también inyectó 400 millones de dólares en BlockFi en junio de 2022 y, de manera adicional, adquirió acciones de BlockFi mediante un acuerdo de préstamo según los registros presentados.
En este contexto, BlockFi sostiene que este pacto no se enmarca dentro de los parámetros habituales de un préstamo convencional. En lugar de eso, se trató de un plazo de 5 años sin garantía, con términos significativamente inferiores a las tasas de interés de mercado y los reembolsos fijados para después de que la empresa, supuestamente, alcanzara un nivel de madurez.
La interpretación de los términos contractuales y las obligaciones subyacentes se convierten en puntos cruciales de debate, lo que pone de relieve la necesidad de un análisis minucioso y una resolución justa en vista de las circunstancias únicas que caracterizan a esta esfera financiera en constante evolución.
BlockFi ha alegado que la inversión realizada por FTX debe ser considerada como una «apuesta», eximiendo así a los acreedores de BlockFi de cualquier responsabilidad en relación con esta inversión.
La posición de BlockFi es que las acciones fraudulentas supuestamente cometidas por FTX que llevaron al fracaso de su inversión no implican que los acreedores de BlockFi deban asumir de alguna manera el costo de esta inversión fallida.
En un contexto más amplio, se estima que BlockFi tiene deudas que ascienden a alrededor de 10,000 millones de dólares, distribuidas entre más de 100,000 acreedores. Esto incluye una deuda de 1,000 millones de dólares con sus tres principales acreedores y 220 millones de dólares que se deben al fondo de cobertura de criptomonedas en quiebra, 3AC.
Desafíos y evaluación legal en un contexto emergente
BlockFi presentó una afirmación en la que alega que Three Arrows Capital (3AC) habría perpetrado actos fraudulentos en relación con los fondos prestados, y en base a ello, argumenta que 3AC tampoco debería tener el derecho a un posible reembolso.
De manera adicional, BlockFi advierte que el litigio que está llevando a cabo con FTX, Three Arrows Capital y otras entidades podría acarrear costos de hasta 1,000 millones de dólares, lo que tendría implicaciones en la cantidad total que BlockFi adeuda a sus acreedores.
Previo a este escenario legal, varios de los acreedores de BlockFi habían acusado a la firma de haber pasado por alto signos de advertencia clave antes de involucrarse en transacciones con FTX y su rama comercial, Alameda Research, en los meses previos al colapso de FTX en noviembre de 2022.
El resultado del litigio podría tener un impacto significativo en la resolución de las deudas de BlockFi y en la determinación de responsabilidades en un contexto de evolución constante en estos mercados emergentes y altamente cambiantes.
A pesar de estas circunstancias, los acreedores lograron un entendimiento el mes pasado, decididos a avanzar con un plan de reembolso acordado mutuamente.
Como parte de su enfoque en la reestructuración financiera, la empresa presentó una solicitud bajo el Capítulo 11 de la Ley de Quiebras el 28 de noviembre. Este movimiento ocurrió aproximadamente dos semanas después de que FTX también tomará la decisión de declararse en situación de quiebra.
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