OpenAI, la entidad que está detrás del desarrollo del chatbot de inteligencia artificial ChatGPT, está actualmente inmersa en la consideración de producir sus propios procesadores de manera interna. Esto se está llevando a cabo en un contexto global caracterizado por una escasez de hardware costoso y de difícil producción. Según una información publicada por Reuters el 5 de octubre y atribuida a fuentes que están familiarizadas con la situación, OpenAI está explorando esta opción.
De hecho, la compañía ha llegado incluso a evaluar una posible adquisición de una empresa no identificada que podría ayudar en la realización de su objetivo de desarrollar procesadores de inteligencia artificial. Esta iniciativa sugiere que OpenAI busca asegurar su suministro de hardware crucial para sus proyectos de inteligencia artificial, en medio de la creciente competencia y la demanda sostenida en la industria de la IA.
Estrategias de OpenAI para abordar la escasez de chips
La empresa todavía se encuentra en la fase de evaluación y no ha tomado una decisión definitiva sobre si llevará a cabo la adquisición mencionada anteriormente. Paralelamente, OpenAI ha estado llevando a cabo discusiones internas con el objetivo de abordar la actual escasez de chips, explorando diversas alternativas.
Una de las opciones bajo consideración implica la posibilidad de construir sus propios chips, lo cual implicaría un control más directo sobre la fabricación de componentes esenciales para sus sistemas de inteligencia artificial. Esta medida podría ser estratégica para garantizar un suministro constante de hardware en un mercado competitivo.
Además, OpenAI está evaluando la posibilidad de estrechar su colaboración con su actual proveedor de chips, NVIDIA, en un esfuerzo por asegurar un flujo continuo de suministros. También se plantea diversificar sus fuentes de proveedores de chips más allá de los actuales para reducir la dependencia en un solo proveedor y mitigar los riesgos asociados con la escasez de hardware.
A principios de este año, el fundador y CEO de OpenAI, Sam Altman, expresó su preocupación ante un grupo de desarrolladores de inteligencia artificial acerca de cómo la escasez de chips estaba obstaculizando el avance de su empresa. Esta inquietud fue registrada en un post que fue posteriormente eliminado, escrito por Raza Habib, el CEO de Humanloop, una empresa especializada en IA.
Según Habib, durante la discusión, se destacó de manera recurrente que OpenAI enfrentaba una limitación crítica en cuanto a la disponibilidad de unidades de procesamiento gráfico (GPU), lo cual estaba generando retrasos considerables en la implementación de sus planes a corto plazo.
El impacto de la escasez en la industria de la IA
Desde el lanzamiento público de ChatGPT en noviembre del año pasado, la demanda de procesadores especializados en inteligencia artificial ha experimentado un crecimiento considerable. Esta creciente demanda ha tenido un impacto significativo en el mercado, con un notable aumento en el precio de las acciones de NVIDIA. Esto se debe a que muchas empresas que buscan desarrollar aplicaciones de inteligencia artificial se encuentran en una competencia feroz por adquirir el costoso hardware de cómputo necesario para llevar a cabo sus proyectos.
La decisión de OpenAI de considerar la fabricación interna de chips es un reflejo de la importancia estratégica de asegurar el acceso a recursos críticos en un mercado altamente competitivo de IA. Esta medida podría proporcionar a la empresa un mayor control sobre sus operaciones y un suministro más predecible de hardware esencial, lo que a su vez podría impulsar su capacidad para avanzar en la investigación y desarrollo de inteligencia artificial de vanguardia.
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